Es posible que con el nuevo año hayas sentido la necesidad de modificar ciertas cosas en tu vida. Quizás empezaste a hacer cambios, a eliminar ciertas cosas y añadir otras, pero después de dos semanas de intentarlo, te sientes extraña o quizás no agarras aun bien las nuevas rutinas. Te sientes incómoda, como impostora, incapaz de mantener esa promesa de compromiso contigo misma que te hiciste. ¿Te sientes así? ¿Has fallado a tus nuevas rutinas? La mayoría de nosotras lo hemos hecho, no estás sola.
De hecho, el tercer lunes del año se conoce como el Blue Monday o lunes azul, porque mucha gente se da cuenta que no ha podido mantener sus resoluciones de año nuevo. Pero no debes dejar que el desánimo y la tristeza tomen control.
Puedes CREAR los cambios que sueñas, puedes CREAR las rutinas que necesitas y puedes CREAR los hábitos que mejor te convienen, puedes estar segura de ello.
¿Qué necesitas para lograrlo? Tienes que CREER que puedes CREAR.
‘’Eso no es tan fácil como se lee, Jess’’, quizás estás pensando, ¿no? Lo se, no es fácil creer en nosotras mismas, porque cuando éramos niñas no creyeron en nosotras, en nuestra capacidad creativa. Siempre nos dijeron exactamente qué debíamos hacer y nosotras lo hacíamos buscando validación, aprobación o mirada de nuestros padres o educadores.
Hoy te quiero proponer algo.
Necesito que saques a la niña rebelde que habita aún en ti, a aquella niña que alguna vez cuestionó las reglas o que desobedeció, a la que no quiso comerse toda la comida o hizo un berrinche en pleno supermercado. Sí a esa. A la que siempre quisieron controlar. ¿Sabes para qué te propongo que la rescates? Para que sea ella la que se rebele contra lo que dicen tus propias creencias limitantes, las voces en tu mente que dicen que no puedes, que eso de año nuevo vida nueva es pura mentira.
Deja salir a tu niña rebelde, la que quiere probar que las cosas pueden ser distintas.
Te propongo un ejercicio:
- Escribe en un diario o cuaderno todas las ‘voces’ que quieres desafiar, como la que te dice que eres incapaz de establecer rutinas, que te es imposible mantener un buen plan nutricional, o que no tienes voluntad para salir a hacer ejercicio. Escríbele una carta a tu niña rebelde y pídele que se encargue de pelear contra esas voces.
- Visualiza a tu niña interna rebelde. Mírala vestida de forma disruptiva, mírala tratando de cambiar el mundo… Escúchala cuestionando lo que le dicen, preguntando mil veces el por qué de las cosas. Visualízala envuelta en una poderosa luz amarilla, casi dorada, que sale del centro de su torso. Escucha lo que dice y hazle caso.
- Escribe mantras o frases de empoderamiento en ‘post it notes’ y colócalas en tu espejo o en algún lugar en el que las puedes ver a diario. Estas frases te ayudarán a ganar confianza y saber que las cosas sí pueden ser distintas.
Espero que este ejercicio te resulte útil y que puedas tomar un segundo aire en tu camino a CREAR los cambios que quieres ver en tu vida. Recuerda que caerte no significa que no puedas seguir. No tienes que volver al inicio ni abandonar el camino. Solo levántate y continúa. Tu puedes.
Te recuerdo que puedes coordinar una llamada exploratoria conmigo para indagar si el coaching creativo holístico es algo que te pueda ayudar a crear aquello que quieres. En mi página de servicios podrás ver todas las formas en que podemos trabajar juntas, ya sea en programas de coaching uno a uno, a través de mi programa Conecta con la CREADORA o uniéndote al Círculo de Creadoras de forma presencial o virtual.