Si me sigues en Instagram sabrás que estoy haciendo varios cambios en mi vida, principalmente a raíz de haber decidido educar a mis hijas en casa. Es un decisión que mi esposo y yo tomamos tras varios años (si, años) de evaluación y la cual -en lo personal- me estoy disfrutando mucho. No obstante, esta decisión llega con consecuencias, porque tengo que cuidar con mayor celo mi tiempo productivo.

Algo que me ha ayudado a afrontar mejor los cambios es decidir que no quiero vivir en el ‘ajetreo’ o el hustle, como lo llaman en inglés. Muchos emprendedores adoptan una actitud sumamente agresiva en el manejo de sus negocios y sienten que tienen que trabajar sin parar. Por eso dedican horas en exceso a sus negocios, y viven en la constante preocupación de un posible fracaso. Las estadísticas no nos ayudan, pues cada dos por tres sale algún reporte diciendo que la mayoría de los emprendimientos fracasan en sus primeros tres años. La presión es agobiante y termina matando nuestra creatividad, que es, precisamente, una de las armas que más necesitamos para triunfar.

Por eso he decidido no vivir ajetreada, sino ocuparme de lo que está en mi agenda conociendo bien qué debo hacer e informándome cómo debo hacerlo.

Te comparto algunos tips que me han ayudado:

Define qué tienes que hacer

¿Sabes cuál es tu meta de facturación, cuánto debes ganar mes a mes para cubrir tu plan financiero de ganancias y ahorros? Define esto antes que todo; es como abrir el Waze y colocar el  destino.

Establece el cómo

Ahora que sabes a donde vas, establece cómo llegarás ahí. cuántas ventas tienes que lograr, cómo y a quién le vas a vender.  Esto te ayudará a enfocar tus esfuerzos en lo que es realmente productivo. Si quieres cosechar manzanas, ¡no siembres peras!

Elimina distracciones

Identifica que cosas te están quitándote enfoque. Quizás no es que estés tan ocupado, sino muy distraido. Yo, por ejemplo, acabo de eliminar un montón de grupos de Whatsapp que me representaban mucha distracción.

Establece horarios

Conoce cuántas horas REALMENTE debes dedicarle a tu negocio. Procura que estas horas sean sumamente productivas. Con los cambios que estoy haciendo, por ejemplo, destino solo 15 horas semanales a mi negocio, pero como tengo claridad de lo que debo hacer, a quién le debo vender y cuánto quiero ganar, estas horas bastan.

Date tiempo para incorporar los cambios

No pretendas establecer el plan hoy y tenerlo en marcha perfectamente mañana. Date tiempo, corrige y experimenta. Ajústate a lo que mejor te conviene.

Espero que estos tips te ayuden a ganar mayor enfoque y a decirle BYE al ajetreo. La creatividad no funciona bajo presión; no la agobies.

Recuerda que estoy a la orden para ayudarte con tus procesos creativos, a generar ideas o a encontrar formas de innovar en tus proyectos. ¡Lo mio es rascar cerebros! ¿Cuándo rascamos el tuyo?

Leave a Reply